El estudio busca encontrar el grado de exposición en niños y mujeres no fumadoras en el hogar. Se usaron medidores ambientales de nicotina y pruebas en cabello en los individuos de estudio, encontrándose alta exposición en niños en hogares de padres fumadores. Teniendo en cuenta que el contacto pasivo con humo de cigarrillo aumenta el riesgo de diferentes tipos de cáncer y enfermedad pulmonar (siendo los niños más sensibles), se resalta como conclusión la necesidad de implementar acciones preventivas integrales para eliminar el tabaquismo activo y evitar el consumo de tabaco en el hogar.
La investigación plantea que el consumo diario de tabaco e intensivo de alcohol en la adolescencia puede configurarse como hábitos persistentes para la vida adulta. Dentro de la misma, se encontró que fumar diariamente se asocia con ser hombre y también que el ser hombre, emborracharse y haber ido de botellón (ir a consumir de grandes cantidades de bebidas alcohólicas en grupos de amigos), aumenta la probabilidad de consumir alcohol de forma intensiva. Se resalta que existen diferencias de género en los consumos de tabaco y alcohol y se plantea la necesidad de tener en cuenta la variable de origen cultural en las intervenciones educativas sociosanitarias.
En el estudio se encontró que el porcentaje de mujeres fumadoras era superior al de los hombres, en concordancia con diferentes trabajos publicados. Dentro de los aportes del estudio se menciona: a) los adolescentes que habían iniciado su consumo de tabaco antes de los 12 años eran más consumidores de cannabis que los que habían empezado el consumo más tarde. b) estudiar el patrón de los jóvenes fumadores y los factores relacionados, permite promover actividades de educación sanitaria e integrarlas en el ámbito escolar. c) las creencias/opiniones existentes sobre el tabaco influyen en su posterior consumo.
Dentro de los resultados del presente trabajo se muestra que la prevalencia de fumadores se ha mantenido estable entre 2000 y 2012. También muestra que la cantidad de cigarrillos consumida por los fumadores diarios se ha reducido y uno de los planteamientos importantes que hace el estudio es incrementar sustancialmente los impuestos a los productos de tabaco, lo cual puede abatir la epidemia de tabaquismo y en consecuencia la mortalidad por enfermedades crónicas en México.
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